¿Qué es el neuromarketing?

Los procesos mentales que afectan a la toma de decisiones de un consumidor, desde recibe un estímulo publicitario hasta que adquiere el producto en cuestión, se pueden conocer gracias al neuromarketing.

Esta ciencia que explica las funciones cerebrales cuanto al marketing y que nos puede ayudar a saber qué técnicas funcionan mejor para que el cerebro humano reaccione ante nuestras campañas publicitarias.

El neuromarketing tiene su base en la neurociencia, que se dedica a estudiar de manera extensa nuestro sistema nervioso para explicar nuestros comportamientos y pensamientos.

Por lo tanto, es lógico pensar que al conocer cómo se organiza el cerebro de una persona, le planteemos la información de manera que podamos predecir cuál va a ser su respuesta psicológica y, por lo tanto, su comportamiento de compra.

Neuromarketing aplicado al marketing digital

Todos los resultados sacados de los estudios de neuromarketing pueden ser fácilmente aplicados al marketing digital, con la finalidad de generar mayor impacto en los receptores de nuestras campañas, teniendo en cuenta una serie de factores que veremos a continuación.

Cada vez es más importante la experiencia del usuario, así que hay que tenerla en cuenta cuando le transmitimos información por las distintas plataformas digitales.

Esta experiencia se basa en los estímulos que el usuario recibe en todo ese proceso, las imágenes, los sonidos, la interacción, la navegación, etc. Pero no hay que usarlos de manera independiente, sino que una buena combinación de ellos podrá asegurarnos llegar mejor a nuestro público.

Haciendo hincapié en este aspecto generaremos contenido con más calidad para los usuarios y más efectivos para nosotros. ¿Cómo? Teniendo en cuenta los siguientes consejos a la hora de crear nuestras estrategias digitales.

Colores

Con los colores logramos transmitir un mensaje al inconsciente del receptor, ya que los asociamos con ciertas sensaciones. El azul, el naranja o el rojo son los colores que más llaman la atención a la hora de recibir estímulos digitales.

Intenta siempre incluir alguno de estos colores en tus campañas según lo que quieras transmitir.

Simplicidad

Si el cerebro recibe una gran carga de información puede que la rechace, por eso siempre se busca algo que sea sencillo y simple.

Usa poco texto y que sea conciso, una imagen que transmita lo máximo con poco, y un diseño sencillo y armonioso. Mejoraremos la percepción del usuario ante nuestros anuncios.

Texto

En concordancia con el punto anterior, toda nuestra información escrita deberá ser preferiblemente breve, directa y clara. Si el usuario ve una gran parrafada, seguramente desista en seguir leyendo, sin embargo, si el texto es corto y está bien estructurado, percibirá una lectura más amena.

Empezar con un gancho, como una pregunta o el planteamiento de una situación con la que el usuario pueda identificarse, también ayudará a que quiera seguir leyendo.

Contraste

El contraste de dos o más conceptos, situaciones, productos… siempre los hace destacar, y esto facilita que podamos recordar más tarde lo que hemos percibido. Jugar con los dobles sentidos o mostrar las dos caras de una moneda, podría ayudarnos a crear una estrategia más llamativa.

8 segundos

Diversos estudios neurológicos han demostrado que el tiempo medio de atención de un usuario ante un anuncio es de 8 segundos, intervalo en el cual decidirá si seguir prestando atención o no a tu publicidad en calidad de la primera impresión.

Intenta comprimir la información de tus vídeos o textos (tiempo de lectura) en 10 segundos o menos, o al menos lo más relevante.

Eye tracking digital

El seguimiento ocular que llevamos a cabo cuando recibimos piezas audiovisuales o interactivas suele ser muy similar en todas las personas, por eso hay estudios que analizan este recorrido para establecer dónde colocar la información.

Eso nos ayuda a la hora de comunicar, ya que podemos colocar la información más importante en los sitios dónde el ojo se centra, y obviarla dónde no se presta atención.

Copywritting

Escoger las palabras adecuadas te puede ayudar a captar mejor la atención de la audiencia y comunicarte con ella de una manera mucho más potente. Hay ciertas palabras o expresiones que ayudan de manera inconsciente a que tu mensaje cale más hondo en el receptor.

Por ejemplo, apelar a las emociones o sensaciones, generar confianza, transmitir seguridad en lo que se dice, recurrir a la imaginación, producir curiosidad… Al final, para este apartado, es mejor contar con un buen copywritter que ame escribir, porque aprender a hacer esto es muy difícil.